Texto: Juan Alama Chova (Hermano Mayor de la Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores)
Querido cofrade:
Un año más, aprovecho la ocasión que me brinda la revista de la Hermandad para enviarte mi saludo más sincero. Este año se celebra el 50º aniversario de la segunda restauración del Cabildo Colegial, sede canónica de nuestra Hermandad. Una efeméride importante para la comunidad de la Insigne Colegiata Santa María de Gandia. Desde aquí, en nombre de la Hermandad y en el mío propio, mis más afectivas felicitaciones.
La Semana Santa, nuestra semana de pasión, acude a la cita puntual, y como no podría ser de otra manera, debemos estar preparados para abrirle las puertas de nuestros corazones y hogares para que habite entre nosotros. Se nos presenta un año más el misterio de la redención de nuestro Señor Jesucristo, como mensaje único y verdadero que debemos tener muy presente por intercesión de nuestra Madre, la Virgen Dolorosa.
Desde que accedí al cargo en 2012, mi principal objetivo ha sido el de buscar la unión y conciliación. Una ardua tarea que trato de desempeñar lo mejor que puedo cada día. El Papa Francisco, en su mensaje de Cuaresma, nos dice que todos formamos parte de un solo cuerpo que recibe y comparte lo que Dios quiere donar. Ese mismo mensaje de unidad es el que deseo para nuestra cofradía. Una hermandad en la que todos somos hermanos y en la que todos tenemos cabida. Al hilo de esto me viene a la cabeza cuando el discípulo Mateo, después de recibir la llamada del Señor, dio un banquete al que asistieron, discípulos, publicanos y pecadores. Al ver los fariseos a Jesús comiendo con esa gente muy gustosamente preguntaron: ¿Por qué come Jesús con todos ellos? La respuesta fue: “No tienen necesidad de médico los sanos sino los enfermos”.
Esta virtud que se debe considerar como el entramado de la convivencia, en la actualidad no causa, al igual que entonces, una gran admiración. Sin embargo, cuando falta se echa mucho de menos. Se vuelven tensas las relaciones y resulta imprescindible, más que nunca, la caridad; el trato se vuelve difícil o quizá imposible, siendo diametralmente opuestos a esta virtud el egoísmo, el gesto destemplado, el malhumor, la falta de educación y el desorden, al vivir sin tener en cuenta los gustos, las preocupaciones e intereses de los demás. Recordando las palabreas de San Francisco de Sales cuando escribía: “De estas virtudes es necesario tener una gran provisión y muy a mano, pues se están usando casi a continuo”.
En este sentido, nuestra hermandad, la de todos los cofrades, sin excepciones, debe ser abierta, pero al mismo tiempo respetuosa con los verdaderos valores que nos unen, teniendo siempre presente que Jesús es un ejemplo vivo para nosotros.
Debemos aprender a ser personas abiertas, con capacidad de amistad, dispuestas a comprender y disculpar, siendo necesario que nos ejercitemos en la convivencia con todos, señalando la importancia de esta virtud “la afabilidad”, que como decía Santo Tomás encierra en otras muchas y que nos conducirá a hacer la vida más grata y afable.
No deberemos olvidar cuáles son los verdaderos motivos por los que de forma voluntaria decidimos formar parte de esta hermandad religiosa. Un principio de amor y fraternidad, mas allá de las cuestiones personales, que no puede faltar y menos cuando representemos a la Hermandad.
Durante este último año hemos trabajado mucho en pro de la cordialidad y fraternidad. Y ese es el camino que queremos seguir recorriendo en lo que queda de mandato. Unir y no dividir. Sumar y no restar. Por ello rezo a nuestra Madre María, para que las pequeñas piedras con las que me encuentro en el camino me resulten fáciles de sortear.
La Cuaresma es un tiempo propicio para mostrar interés por el prójimo, con un signo concreto, aunque sea pequeño, de nuestra participación en la misma hermandad. Como decía Mahatma Gandhi: “Cuida tus pensamientos porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Y cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino”.
Recordar las palabras de San Juan, 17 (21-23): “No ruego solo por ellos, sino también por los que creen en mí a través de su palabra. Que todos sean una sola cosa; como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos sean una sola cosa en nosotros, para que el mundo crea que tú nos has enviado. Yo les he dado la gloria que tú me diste para que sean uno, como nosotros somos uno”.
Este año la junta directiva que yo presido ha decidido realzar uno de los actos que sirven para abrir la Semana de Pasión, como es nuestra procesión penitencial de los Siete Dolores de María. Como sabrás, el año pasado se celebraron las bodas de plata de la instauración de dicha procesión. Una manifestación religiosa imprescindible en el programa de actos de la Semana Santa de Gandia. Es por ello que pensamos que debíamos darle un nuevo impulso. Debíamos pensar de qué manera podríamos potenciar el acto. Hacerlo más atractivo a través de la innovación. La apuesta tal vez resulte arriesgada, pero pensamos que vale la pena. Este año cada dolor será interpretado por la Coral Polifónica Sagrada Familia de Gandia, bajo la dirección de Telmo Gadea. La coral se encargará de interpretar el pasaje bíblico de cada uno de los dolores previamente a la reflexión del dolor, como se venía haciendo habitualmente. También la Virgen volverá a desfilar portada a hombros, pero en esta ocasión por diez mujeres, en la parte delantera, y ocho hombres en la trasera. Esperemos que la iniciativa resulte de tu interés.
Las nuevas tecnologías nos permiten poder escuchar cuantas veces queramos la interpretación de los dolores a través de esta revista. Para ello hemos alojado en nuestra web los distintos tracks a los que podrán acceder de forma directa por medio de sus dispositivos móviles. Para ello, solo tendrán que capturar los distintos códigos QR situados junto a la ilustración del dolor correspondiente.
Recordad que la hermandad tiene abiertos diferentes canales de información. Además de su página web dolorosagandia.com, también está presente a través de sus perfiles en las redes sociales @dolorosagandia (twitter) y Hermandad de la Virgen Dolorosa Gandia (facebook).
Que nuestra madre Dolorosa nos guíe y nos ayude a ser mejores cofrades.
Madre Dolorosa, ruega por nosotros.
